México.- El clima dio tregua para que la Caravana Nacional por la Defensa del Agua, el Territorio, el Trabajo y la Vida arribara al Zócalo capitalino.
En medio de aplausos, y al grito de “¡no están solos!”, integrantes de la Tribu Yaqui de Sonora caminaron al templete que se instaló frente a la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), donde realizaron un mitin.
Durante 11 días, recorrieron 75 municipios para explicar porque se oponen al Acueducto Independencia, que se construyó con el aval del Gobierno sonorense.
Los representantes yaquis Tomás Rojo, César J. Tórtola, Agustín Molina, José Manuel Muñoz y Luis Urbano Domínguez se dividieron para estar en las dos caravanas del sur y las dos del norte.
Cinco años de lucha
En su mensaje, Rojo, quien en su lengua pidió permiso a sus mayores para tomar la palabra, convocó, a nombre de la comunidad, a los mexicanos a evitar la privatización del agua e impedir que les arrebaten a los pueblos indígenas sus recursos naturales.
Recordó que llevan cinco años en defensa de su territorio y que “desafortunadamente” tomaron el camino de la legalidad para detener el Acueducto Independencia.
Sin embargo, la Suprema Corte no fue garante de la Constitución y no fue uno de los pilares del Estado Mexicano.
El Acueducto Independencia “pone en riesgo nuestra existencia como pueblo, pone en riesgo nuestra existencia milenaria en esas tierras.
“Nosotros tenemos 2,500 años habitando esas tierras. Llegamos al río y hoy más que nunca se ven amenazados nuestros ancestrales", pues recordó que cuando era presidente, Lázaro Cárdenas decretó que las aguas del río Yaqui serían para esa tribu.
Asimismo, negó que el agua que les han quitado sea para uso doméstico de los habitantes del municipio sonorense de Hermosillo, sino que va para los corredores industriales.
Rojo aseguró que ese Acueducto fue el principio para modificar la Ley General de Aguas, “dejando en las manos privadas la extracción, la conducción, el tratamiento, distribución y el cobro” del vital líquido.
“Ese mismo golpe se pretende dar a cada una de las familias y a cada uno de los hogares de México”, sostuvo.
En este tenor, anunció que en los próximos días interpondrán amparos contra la iniciativa de ley de aguas en la entidad porque consideran que ésta violenta los derechos de los mexicanos.
¡No lo permitiremos!
"Lo que están haciendo con la Tribu Yaqui lo están haciendo con todos los pueblos”, lo harán con todos los mexicanos y “no lo podemos permitir”, externó Tomás Rojo, quien recomendó: “debemos organizarnos".
Los yaquis también exigieron la liberación de sus compañeros Mario Luna y Fernando Jiménez.
Esa demanda resonó entre los presentes en el mitin, quienes a una voz gritaron: “¡Presos políticos, libertad!”.
La protesta contó con la simpatía de integrantes de diversas organizaciones sociales, sindicales, campesinas, indígenas, defensoras de derechos humanos, ambientalistas y estudiantes.
“¡Vivos se los llevaron, vivos los queremos!”, se escuchó en el mitin, tras exigirse también la presentación con vida de los normalistas de Ayotzinapa, Guerrero, que permanecen desaparecidos desde el pasado 26 de septiembre, cuando fueron atacados en Iguala.
Reconocer a los indígenas es reconocer nuestro territorio
Al tomar la palabra, Martín Esparza, líder del Sindicato Mexicano de Electricistas (SME) destacó que en su recorrido, la Caravana por la defensa del Agua ha sido un éxito, porque en todo su camino recogieron los reclamos de los pueblos indígenas y campesinos que están siendo despojados de su territorio y de su agua por paramilitaes, el Ejército y las policías estatales y federales.
Consideró que reconocer a los indígenas es reconoce a nuestro territorio.
En este sentido, lamentó la expresión del consejero presidente del Instituto Nacional Electoral (INE), Lorenzo Córdova hacia los pueblos indígenas.
El líder electricista resaltó que no todo es desaliento en el país, pues recordó que en Sonora se ordenó llevar la voz de la Tribu Yaqui a la sociedad mexicana.
Además, resaltó que en Cherán, Michoacán, manda el pueblo organizado, pues “echaron” a las autoridades, así como a los partidos políticos.
Apenas concluyó el mitin, que duró alrededor de una hora, y cayó un aguacero, cuyas primeras gotas obligaron a los presentes a correr para resguardarse.
Pero, el capitán de la Tribu Yaqui, César Cota, alcanzó a terminar su discurso.
Ya el cielo estaba muy gris. Lo que se avecinaba era inminente.
“La tribu yaqui va a seguir luchando. Gracias a los ciudadanos y a todos los que nos están apoyando. Ya no estamos solos. Gracias”, alcanzó a concluir Cota.
Fuente: SDP Noticias
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