La Jornada
Madrid. Los Indignados españoles llamaron manifestarse en Madrid antes de las elecciones del 20 de noviembre, decididos a desafiar una prohibición de concentrarse en más de 100 lugares de la capital, entre ellos, la Puerta del Sol, decretada por las autoridades durante la campaña.
Bajo el lema, “¡Cambio de modelo ya!”, preparan una manifestación para el 13 de noviembre en el centro de la capital, en “defensa de lo público, la participación ciudadana y la condena de la corrupción y de la especulación urbanística, que sigue imperando como modelo económico”.
En las redes sociales Twitter y Facebook, los Indignados también instan a concentrarse el 19 de noviembre en la Puerta del Sol, la víspera de las legislativas; es decir, en la jornada de reflexión en España, en que están prohibidas las manifestaciones.
Una movilización similar había reunido a decenas de miles de personas en la misma plaza la víspera de las elecciones regionales del 22 de mayo para denunciar las consecuencias de la crisis económica y expresar su descontento con los grandes partidos políticos.
Definiéndolos como “lugares públicos reservados a la realización gratuita de actos de campaña”, el comité electoral encargado de velar por el buen desarrollo de la campaña ha prohibido de hecho las concentraciones entre el 4 y el 19 de noviembre en las plazas emblemáticas del movimiento, surgido el 15 de mayo a una semana de las elecciones regionales y locales.
Sede de sus grandes concentraciones, la Puerta del Sol ha sido incluida en entre esos “lugares públicos” reservados, al igual que varias otras plazas cercanas, también ocupadas en varias ocasiones por este movimiento.
La decisión de la comisión electoral es “contradictoria” en el contexto de una campaña, denuncia un comunicado de los Indignados: Si bien los ciudadanos deben escuchar los mensajes de los partidos, también es el momento en el que los partidos escuchen a los ciudadanos de los que, mucho nos tememos, están tan alejados”.
Bajo el lema, “¡Cambio de modelo ya!”, preparan una manifestación para el 13 de noviembre en el centro de la capital, en “defensa de lo público, la participación ciudadana y la condena de la corrupción y de la especulación urbanística, que sigue imperando como modelo económico”.
En las redes sociales Twitter y Facebook, los Indignados también instan a concentrarse el 19 de noviembre en la Puerta del Sol, la víspera de las legislativas; es decir, en la jornada de reflexión en España, en que están prohibidas las manifestaciones.
Una movilización similar había reunido a decenas de miles de personas en la misma plaza la víspera de las elecciones regionales del 22 de mayo para denunciar las consecuencias de la crisis económica y expresar su descontento con los grandes partidos políticos.
Definiéndolos como “lugares públicos reservados a la realización gratuita de actos de campaña”, el comité electoral encargado de velar por el buen desarrollo de la campaña ha prohibido de hecho las concentraciones entre el 4 y el 19 de noviembre en las plazas emblemáticas del movimiento, surgido el 15 de mayo a una semana de las elecciones regionales y locales.
Sede de sus grandes concentraciones, la Puerta del Sol ha sido incluida en entre esos “lugares públicos” reservados, al igual que varias otras plazas cercanas, también ocupadas en varias ocasiones por este movimiento.La decisión de la comisión electoral es “contradictoria” en el contexto de una campaña, denuncia un comunicado de los Indignados: Si bien los ciudadanos deben escuchar los mensajes de los partidos, también es el momento en el que los partidos escuchen a los ciudadanos de los que, mucho nos tememos, están tan alejados”.
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