Blake Mora temía morir y dejar a sus hijos

Vanguardia
TIJUANA.- Ocho días antes de que falleciera en un accidente aéreo, José Francisco Blake Mora, experimentó el temor a morir y no estar más al lado de sus hijos.

Aquel cuatro de noviembre, durante el servicio fúnebre del alcalde de La Piedad, Michoacán, Ricardo Guzmán, dejó correr algunas lágrimas cuando cargó al más pequeño de los hijos del gobernante ejecutado el dos de noviembre.

En el vuelo de regreso a la Ciudad de México no se pudo contener. Una vez más, las lágrimas rodaron por sus mejillas ante el sólo hecho de pensar en morir y que sus hijos se quedaran sin su padre.

“Fue sincero en la indignación de ver a esos niños sin padre”, reveló Juan Marcos Gutiérrez, actual encargado de despacho de la Secretaría de la Gobernación, en un texto que escribió para recordar a su amigo, a su compañero de aventura en la política nacional.

Blake Mora, o “Pepe”, como le llamaban sus amigos, manifestó lo mucho que le dolía que esos niños, los hijos del alcalde de La Piedad, se quedaran sin padre. En lo único que podía pensar era en sus hijos, “le preocupaba ocupar ese lugar”…el de quien está en el féretro.

Esa noche, comentó Juan Marcos, cenaron con un legislador de su misma generación. Salió a la conversación el tema de la familia, de la paternidad, de sus muchas ausencias por motivos laborales. “Compartimos miedos y angustias”, relacionadas con los riesgos de su trabajo y de la siempre latente posibilidad de un día no estar para sus hijos.

Yadira López, quien se desempeñaba como secretaria particular de Francisco Blake en la Secretaría de Gobernación, fue la encargada de dar lectura al texto durante la ceremonia de homenaje que se realizó en la sede del Partido Acción Nacional (PAN) de Tijuana, en memoria del Secretario de Gobernación y de sus colaboradores Alfredo García Medina y Diana Hayton Sánchez.

En éste, Juan Marcos Gutiérrez se refirió al encargado de Comunicación Social de la Secretaría de Gobernación como una persona con arrojo, con un enorme sentido de compañerismo y una capacidad que no cree volver a encontrar.

A Diana Hayton Sánchez la describió como una persona inteligente y entregada, frágil y modesta.

Un amigo muy cercano a Alfredo García, René Aispuro, recordó el talento que tenía su compañero en el futbol americano, pese a no tener una estatura alta. “Era el más bravo de nuestros corredores, tenía mucha fuerza, mucho empuje”.

Pidió recordarlo por su valores, porque no se dejaba doblar ante nada. Agradeció a los padres de Alfredo porque “nos dieron al mejor de los hombres”.

Nicole Bullok, hermana menor de Diana Hayton, se expresó así de la secretaria técnica de la Segob: “mi hermana preciosa, tan hermosa, con una sonrisa daba alegría, con mirarla un segundo te enamorabas de ella, era una persona muy feliz hasta en los tiempos más tristes”.

Dijo que nunca conoció a una persona tan trabajadora como ella, “la vamos a extrañar muchísimo, nunca la vamos a olvidar”.

Ivy Cervantes, comunicóloga y amiga cercana de Diana, comentó que algunos de los planes de la funcionaria eran casarse y tener hijos. En son de broma llegó a creer que probablemente “sería con un chilango”, porque esperaba que su estancia en el Distrito Federal fuera por mucho tiempo.

Reveló que Diana Hayton apoyaba a Josefina Vázquez Mota en sus aspiraciones, por tratarse de una mujer, “a ella le importaba mucho que las mujeres estuvieran activas en el partido”.

El dirigente municipal del Partido Acción Nacional, expresó ante militantes y familiares de los fallecidos, que no quisieron dejar pasar la oportunidad de hacer una sentida despedida a tres panistas destacados, que además fueron un ejemplo por lograr las metas que se fijaron.

“No sólo perdemos a grandes amigos, sino a extraordinarios panistas y grandes mexicanos”, expresó.

De Alfredo García dijo que le admiraba su inquietud y su inteligencia para enfrentar las cosas, a Diana Hayton la describió como una mujer hermosa, inconfundible, alegre.

Mientras que a Francisco Blake lo recuerda por ser un extraordinario pitcher en su juventud y ser un hombre de retos, habilidades, valores, resultados, alejado siempre de los protagonismos. “Perdemos a un excelente panista”.